jueves, 29 de octubre de 2009

Como una rosa encerrada en cristal.

Rosa seca entre cristales.



Como rosa muerta encerrada entre piedras y cristal,
 así se siente.
En un mar de reflejos que no son propios,
 así se entiende.
Dormida en el tiempo y encerrada,
 así se encuentra.
Olvidada por el viento y por el agua.
Sin olor, sin color,sin dolor y sin esperanza.
En el fondo de un cajón,en una vitrina,
en el último recodo de tu alma.
Esta es la fotografía de la mirada perdida,
 de la tuya, de la mía, de la que no fue
  y quiso ser un día.

domingo, 18 de octubre de 2009

RECUERDOS DE ARCHIDONA

RECUERDOS DE ARCHIDONA


Quién sería tan desagradecido de no querer volver al lugar que fue tu hogar y tu escuela, tu punto de encuentro con la vida, la ventana al mundo el lugar de juegos y el juego de la vida durante los primeros 20 años de la vida.




Pues si , yo vuelvo cada vez que puedo y cada vez me emociono más con lo recordado, las cosas que han cambiado y con las que perduran en el tiempo como si este no hubiese pasado



Pequeñas miradas aquí allí, pinceladas de amor, recuerdos de humor, palabras de honor, risas, llantos, juegos de iniciación.

Carreras y paseos, citas y encuentros sin tiempo y sin reloj. Fotos para el recuerdo y recuerdos sin fotos, imposibles de olvidar.

Charlas, discusiones ,enseñanzas, preguntas sin respuesta, sufrimientos sin consuelo de juventudes perdidas, sentimientos, sobretodo sentimientos que nos han hecho crecer y doblar la esquina para dejar atrás aquello que no pudimos llevarnos.



Idas y venidas con la vista perdida y la emoción en el alma.

Sin aliento hacia arriba, sin descanso hacia abajo.

¿Quién te espera?¿Dónde vas?

¿Con quién quedas? ¿A qué hora vuelves?



Caminos, siempre caminos, Hacia donde tu quieres ir, de donde quieres volver, de donde no quieres salir, donde quieres llegar.


Recuerdos de la falta de aliento, el llegar tarde a casa, correr por los caminos y no morir en el intento.


Nunca olvides de donde vienes, donde vas y donde te gustaría llegar

sábado, 17 de octubre de 2009

Turismo en Archidona


Si, un poco de turismo siempre viene bien para poner en orden el recuerdo que tenemos de los lugares a los que pertenecemos o en algún modo nos pertenecen.








Cuántas veces habré subido y bajado estas calles, tortuosas y heladas o festivas y endemoniadamente calurosas.

Cuántas veces habré saciado mi sed en esta fuente que ha devuelto sin rechistar la vida y el aliento a mi fatigado cuerpo.







Que recuerdos de lugares tan dispares y tan anodinos que al volver a recorrer sacan de la última esquina de tu recuerdo imágenes perdidas en el tiempo, frases grabadas como a fuego,
amigos y juegos, carreras,lluvias y desencuentros.


No hay nada tan extraño como esto.
Una imagen en el tiempo forzosamente irregular e irrepetible.
Sensaciones extrañas de algo con significado inexpugnable.

Siempre me llamó la atención que una ventana pequeña se perdiera bajo una más grande.
Esa es su forma de que no sea raro fijar la vista en ella.


Imposible pasar sin llegar, una miradita de reojo y tus pies se van solos hacia dentro.

Acogedor patio lleno de luz y fresco al mismo tiempo.
Una corta oración ,un deseo, una toma de contacto con el cielo un respiro antes de emprender el largo tramo de camino.



Hay tantos pasos que no dí, por tantas calles que no me perdí y tantas otras que me empaparon de su esencia y me mimaron con su prudencia que no hay ningún otro lugar en el mundo como este para hacerme volver siempre con nostalgia y curiosidad al mismo tiempo.
Cada visita me pide volver a lo que ya conozco y seguir buscando lo que vi.
Y realmente siempre hay algo nuevo que traer en la mochila.

Esta vez fueron caminos viejos y nuevos conocidos como principio pero no como ruta de llegada.
Caminos por los que jugaba y corría solo como lugar de ocio pero no como puerta de entrada o salida.















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jueves, 1 de octubre de 2009

Un paseo por Marbella

Iglesia del Santo Cristo.
De camino al centro.
Una calle de Marbella.
La ventana de La Fonda.
Una plaza preciosa.
Una tarde, como otra cualquiera, quedamos unas amigas para tomar café.

Hacía tiempo que no cogía mi cámara y me dio por hacerlo para tomar unas fotos del evento.

Bien , me fui en plan turista haciendo fotos por las calles y me di cuenta que hay lugares que de tanto patearlos no los ves.

Plazas y calles llenos de luz y color donde nunca falta algo extraordinario que observar.

Una casa vieja y llena de color que es emblema de esta ciudad, cuanto arte y cuantas historias que no hemos conocido.



Calles llenas de plantas que nos dicen cuanta gente viva hay detrás de esas puertas cerradas,
sombras en las paredes que llenan de belleza los rincones más descuidados, paseos encantadores
de gente desconocida que se llevará los recuerdos de momentos únicos que los que vivimos aquí muchas veces nos perdemos por la cotidianidad y las carreras del lugar donde vivimos.

No hay nada como detenerse un minuto para descubrir lo que tenemos y no perdernos en lo que deseamos.
Una bonita tarde en la que nos quedamos extasiadas en esta plaza disfrutando del aire limpio
y el movimiento de la vida que pasa.