jueves, 10 de enero de 2013

El sacrificio de los políticos

Impasibles esperamos que algo cambie las cosas. Impotentes ante tanta mala gestión, borrachos de tanto escuchar lo que pasa, nos quedamos mirando la desgracia ajena y esperando que nos pasé lo mismo con el único propósito de saltar en el momento que ya no quedé más justificante que arreglar lo nuestro. Y cada día con el estomago más revuelto, vamos sintiendo como nos vacían los bolsillos, nos anulan la voluntad y nos dejan un futuro de despropósitos. Cada día hay más médicos, abogados, maestros, arquitectos, empleados públicos, albañiles, cocineros, niñeras, limpiadoras, jóvenes y adultos sin trabajo y sin esperanzas de encontrarlo. Cada día más personas con trabajo que miran a los desempleados como parásitos a los que mantienen a duras penas. Y entre tantos enfados y desesperos, entre tantos indignados y otros letreros nadie se pone manos a la obra para quitar políticos de en medio. Cada día crece el numero de políticos a los que nadie le baja el sueldo, ni le hace un conteo de productividad, ni le controlan las horas de vuelo, ni le suben el IRPF, ni le bajan las horas extras, ni les sancionan por hacer mal su trabajo. Es lo único en este país que sigue creciendo y no sé por que no se vanaglorian de ello, tan dados como son a alardear de números en crecimiento, de algunos, claro, otros son como los sucesos, siempre se dejan para el final, a ver si no da tiempo. Y así seguimos con el aburrimiento de ver como pasa el tiempo y se alarga la hora de que empiece el crecimiento de la vida real que estamos perdiendo. Hace dos o tres años se decía que en 2013 ya estaríamos saliendo de la crisis, más tarde , a finales de 2011, se decía que para el 2014 y ahora que 2014 está a la vuelta de la esquina y el engaño se ve tan continuo y repetitivo, ya van diciendo que de esta no salimos por lo menos en 25, no en 2025, no. En 25 años más como mínimo. ¿Dónde está la vocación de los políticos? Señores ser político no es solo un trabajo bien remunerado, es lo que pensaba yo, que ingenua de mí que siempre creí que eso debería conllevar una gran ración de responsabilidad y sacrificio. SACRIFICIO. Acto de abnegación inspirado por la vehemencia del amor. Matanza de animales, especialmente para el consumo. Peligro o trabajo graves a que se somete una persona. Acción a que alguien se sujeta con gran repugnancia por consideraciones que a ello le mueven. Sacrificio, el propio y no el de los demás para el propio beneficio.

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