viernes, 18 de marzo de 2011

REUNIÓN: 1:30 VIALIA. MÁLAGA


Compañeros de piso en 1980

Hace algunas semanas tuve una importantísima reunión con amigas.
De repente y sin motivo alguno, surgió una necesidad. Imperiosa necesidad de encontrarnos.
Tres ya estábamos en contacto y como por telepatía, las otras empezaron a aparecer.
Durante unos cuantos montones de años: nos hemos recordado, querido y respetado la intimidad, conscientes de que nos contamos todo lo que sabemos que es importante o necesita de apoyo.
(¿ Y SI USAMOS MÁS EL TELÉFONO? )
Hay lazos que se hacen fuertes por las circunstancias, por los momentos vividos,por lo aprendido o por lo llorado, pero sobretodo por lo compartido.
Y además el nuestro se hizo fuerte solo por el hecho de desearlo; un día nos cortamos los dedos y mezclamos nuestra sangre, así que ahora tenemos  revueltos los anticuerpos.
Ayudaron las risas, las noches de charla sin tabaco, el estudio compartido, las decepciones y los garbanzos; el café colado, los armarios y las ilusiones cumplidas.

Bueno , pues nos pusimos de acuerdo para vernos y quedamos un sábado por la mañana, en Málaga, como no.

Y con el calor, de los abrazos y los besos, derretimos lágrimas con recuerdos. Nos pusimos al día.
nos llenamos los espacios de nombres, historias, sentimientos importantes: algunos compartidos y otros no.
Y aunque algunos hijos, no  los conocemos, los sentimos como sobrinos y sus caras son como abrir libros leídos.

(Aquí y por arte de no se sabe qué, me llamo Toñi. 30 minutos de teléfono. La inspiración trastorná. JAJAJAJAJA

Y aunque algunos amores han cambiado, los respetamos celebrando los que están y llorando los que no.
Del ramo que formamos con nuestros amores, se nos cayó una flor.
no lo olvidaremos porque también un cachito de su ser y su risa nos compartió.

Compañeras de piso en 2012
Volvimos como ayer a ser niñas, compartiendo lágrimas y risas. Nos fundimos en abrazos y se nos hizo corto el día. 

Nos quedamos a dormir juntas.
Aunque mayores de edad, no hicimos locuras, no corrió el alcohol y como hace 30 años, acabamos dormidas por los sofás, sin intención de acabar de hablar por si había algo más que contar.
El desayuno no estuvo mal, pero el sabor a despedida no acababa de alimentar. Se acabó el café y pedir otro a las 12:30 de l día , suponía quedarse para almorzar.

Así , sin ganas  de despedida y aguantando las lágrimas decidimos repetirlo pronto.
Si, pronto , que si no, los nietos nos van a tener  " muuu ocuupás "  y no vamos a poder.
Algo tan importante como agradecer a nuestras parejas este momento , al que ellos también  han aportado
su respeto, creo que es merecido y necesario.  GRACIAS CHICOS SOIS UN ENCANTO.

1 comentario:

  1. hola, buenas tardes,gracias por sumarte,a seguir mi blog!
    gracias por estar y compartir! interesante tu post!gracias,muchas gracias!
    un abrazo,besos
    lidia-la escriba

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